
En España, quizá por un asunto de personalidad, acostumbran a mezclar acontecimientos históricos con componentes legendarios míticos, religiosos y románticos dando como resultado hermosas narraciones que apoyadas en una base real (un hecho histórico) adquieren en su totalidad una cierta veracidad.
Buscando en archivos y escritos en Internet me he topado con varias de estos relatos los cuales para un mejor entendimiento de ustedes los he reescrito en español moderno conservando su esencia, pero si alguno quiere comprobarlo, al final de nuestra historia pondré los “links” correspondientes.
Y dicen así…
TIRSO DE AVILES, (Historiador asturiano nacido en Bolgues (pueblo del concejo o municipio de Las Regueras) en la primera mitad del siglo XVI, quizás entre 1530 y 1532.) Decía de los Morán asturianos en su obra “Armas y Linajes de Asturias”:
“Los Moranes de Asturias de Oviedo son muy antiguos y de mucha nobleza, especialmente en el Concejo de Gijón y el apellido les viene en línea recta del Caballero de Soelmonte descendiente directo de un capitán griego llamado Moranto a su vez descendiente del fundador de la villa de Gijón. Este caballero en la batalla que hubo en Covadonga cautivó a una hija de un Rey moro (árabe) con la cual tuvo algunos hijos y como la madre era mora los hijos y sus descendientes se llamaron Moranes. Estor traen por armas cinco hierros de lanza ensangrentados color plata, en campo azul, el mismo que antes de la batalla de Covadonga ya llevaba el Caballero de Soelmonte”
También se dice que pintan estos dichos Moranes un águila negra en campo colorado, sobre un yelmo encima de él, sacándole por arriba: Que debió de ser, que en alguna batalla, esta águila debió quitar el yelmo a algún capitán moro por lo que se venció la batalla. De estas dos armas podían escoger los de este apellido las que quisiesen, o poner ambas juntas en un solo escudo y el blasón del águila con el yelmo es el siguiente:
“Es un águila real,
Armas do viven Moranes,
Juntamente con la cual,
Yelmo de grandes hazañas;
En campo lleno de sangre,
Está pintado aquello,
Porque el águila de presto,
Le sacó con uñas grandes.”
Hermoso relato que pinta por entero aquellas épocas de la Edad Media. De Caballeros Andantes, el Cid Campeador y el Rey Arturo con sus caballeros de la Mesa Redonda.
A su vez, el MARQUÉS DE JAUREGUIZAR (Genealogista español contemporáneo) trata así sobre los Morán, ligados a los Labandera, ambos asturianos, en su obra “Nobiliario de Navarra”…
Comienza transcribiendo “un manuscrito del siglo XVIII que conserva en su archivo”, que dice:
“Los del linaje y apellido de Labandera y Huergo descienden, por línea recta, del valeroso capitán Gorgeos el Griego, el cual vino, en compañía del capitán Girion, navegando por el Océano con sus ejércitos, y una tempestad desbarató toda la flota greciana (griega), llevándolos a las costas de Asturias, de Oviedo, en el puerto de Gijón, y ahí edificaron dichos capitanes, Girion y Gorgeos, dicha ciudad, a la que llamaron ciudad de Girion, que hoy día conserva el antiguo nombre”.
Este capitán Gorgeos, que fue valeroso y de mucho esfuerzo, el cual tuvo dos hijos, que, imitando a su padre, fueron asimismo muy esforzados e hicieron muchas proezas: el uno se llamó Gorgeos y el otro Moranto.
De Gorgeos descienden los Labanderas y Huergos, y de Moranto, los Moranes, que estos linajes son primeros por descender del dicho capitán Gorgeos. Estos hermanos tuvieron hijos, los cuales llevaron dichos apellidos; unos se quedaron en dicha ciudad de Girion, otros se metieron a la tierra adentro y edificaron en el pueblo de Uergo. Otros se fueron a poblar Lugo de Asturias con Gunderico, rey de los vándalos, y después, destruida por los mismos…”
“Los Moranes de Gijón traen por armas cinco hierros de lanza en campo azul, corrientes en sangre hasta la mitad, y la boca de los hierros cardenales y dorados, el caballero que estas armas ganó fue Ruy Fernández de Soelmonte, hijo de Moranto de Gorgeo, el que con el Infante don Pelayo quedó fuera, que no cupo en la cueva de Covadonga con dicho Infante y el que venció a los moros en la batalla que ahí se dio traía antes por armas estos cinco hierros de lanza que en otras batallas había ganado, matando a cinco enemigos de nuestra fe les quitó las lanzas y trajo de ellas cinco hierros como cosa notable, y en señal de gran misterio están en campo de azul y los hierros de plata, que es limpieza, señalados con sangre, que representan cómo este caballero mató estos cinco enemigos y quitó las dichas lanzas, las cuales pintan los Moranes de Gijón, así que estas armas son color sobre metal.”…
…y continua…
…“Es de saber que este caballero Ruy Fernández de Soelmonte, por dicha batalla de Covadonga, añade a sus armas, a más de los cinco hierros de lanza, un manojo de banderas, una luna en cada bandera, asidas por un brazo arremangado, que es el temple de estas armas, que son las que pintan y hoy traen por armas los descendientes de este caballero, que se llaman de solar y apellido de Soelmonte, y llamáronse Moranes porque este caballero en aquella batalla gloriosa de Covadonga. Como vencedores cautivó una hija de un rey moro de los que allí se hallaban, en quien tuvo algunos hijos, y por varonía descienden dichos Moranes de este caballero y de esta hija de este rey, por lo que los apellidaron Moranes, lo cual sucedió todo en la casa de Labandera; mas los hijos que hubo unos se apellidaron Moranes, y otros Soelmontes, y otros Moran Labandera, y así los del apellido Soelmonte traen por armas el manojo de banderas con las lunas en cada una y con el brazo arremangado y los Moranes los cinco hierros, como se ha dicho.”
Como podrán leer, ambos narradores coinciden en sus relatos basados en la tradición oral y si a esto sumamos el hecho histórico de la “Batalla de Covadonga” con la cual se inició la reconquista de la Península Ibérica de manos de los árabes se dificulta rechazar el origen ibérico del apellido “Morán”.
Hay otras teorías como el origen Irlandés del apellido y también las veremos.